Tener fibrilación auricular (FA) significa ser cinco veces más propenso a padecer un derrame o un infarto cerebral. Además, los accidentes cerebrovasculares debido a la FA tienden a ser más graves, pueden ocasionar un daño mayor al cerebro y conllevar duros efectos a largo plazo. Por eso, es fundamental recibir un tratamiento para reducir los riesgos de que se produzcan estas complicaciones1.
Uno de los tratamientos principales para los pacientes con FA es la medicación anticoagulante. El tratamiento también puede incluir otros medicamentos o procedimientos quirúrgicos para restablecer el ritmo cardíaco1.
El tratamiento anticoagulante puede aumentar el riesgo de sangrado2. Por eso, te brindamos unas sencillas pautas que pueden ayudarte en tu vida cotidiana a prevenir complicaciones por sangrado:
● Pedí ayuda médica inmediata si notás sangre marrón oscura en la orina o en el vómito, heces negras y alquitranadas o, si sos mujer, si tenés períodos menstruales más abundantes2.
● Utilizá un protector de dedos para preparar tus alimentos en la cocina3.
● Usá un cepillo de dientes más suave para proteger las encías, ya que los sangrados en la boca pueden producirse con más facilidad3.
Si se presentan efectos secundarios molestos y duraderos, lo mejor es hablar con el médico tratante para que esté al tanto de la situación e indique cómo proseguir (2). Si se experimenta cualquiera de las siguientes manifestaciones también es aconsejable ponerse en contacto con el médico2,3:
● Dolor de cabeza
● Dolor de estómago
● Mareos, debilidad
● Náuseas
● Hematomas inusuales
● Cortes
● Hemorragias nasales
● Sangre al toser
● Sangre en la orina o en las heces
Este material es de carácter educativo e informativo únicamente, no sustituye ni reemplaza la consulta médica, y en ningún caso deberá tomarse como consejo, tratamiento o indicación médica. Ante cualquier duda deberá consultar siempre con su médico tratante.
