¿Qué es la meningitis?
La meningitis es la inflamación de las membranas que cubren al cerebro. La causa infecciosa es la más frecuente y dentro de ésta, los virus y las bacterias son los más comunes. Las meningitis bacterianas pueden poner en riesgo la vida o dejar secuelas neurológicas permanentes si no son tratadas a tiempo con antibióticos.1
Signos y síntomas de la meningitis
Los síntomas de la meningitis pueden ser similares a los de otras afecciones médicas; por lo cual ante los mismos siempre se debe hacer una consulta médica para obtener un diagnóstico.1
Los síntomas de meningitis pueden variar de acuerdo con la edad de la persona. En lactantes es más frecuente que se presente con irritabilidad, fiebre, rechazo al alimento, mayor tendencia al sueño que lo habitual y/o llanto intenso, continuo e inconsolable.1
Que debes notar en tu hijo: síntomas de meningitis en tu bebé
A veces, los lactantes presentan síntomas distintos de los adultos2:
• descenso de la actividad y dificultades para despertarse2
• irritabilidad y dificultad para calmarse2
• alimentación deficiente2
• rigidez o laxitud corporal2
• un punto blando abultado en la parte superior de la cabeza (fontanela)2
Prevención y estrategia de vacunación en Argentina
Las vacunas ofrecen la mejor protección contra los tipos comunes de meningitis bacteriana.2
Las vacunas pueden prevenir la meningitis causada por:
• meningococos2
• neumococos2
• Haemophilus influenzae de tipo B2
En Argentina, la vacuna antimeningocócica conjugada tetravalente (ACYW) es la que se encuentra disponible gratuitamente en el Calendario Nacional de Vacunación para proteger contra las infecciones graves causadas por meningococo (enfermedad meningocócica invasiva) y sus potenciales complicaciones.1
Según la estrategia de vacunación en Argentina, existen dos esquemas diferenciados según etapa de la vida1:
Lactantes1
• 1era dosis: 3 meses de vida
• 2da dosis: 5 meses de vida
• 1er refuerzo: 15 meses de vida
Estas dosis tienen el objetivo de proteger de la enfermedad al grupo etario más vulnerable y con mayor riesgo de enfermar y morir.
Adolescentes1
• Una dosis única: 11 años
Este material es de carácter educativo e informativo únicamente, no sustituye ni reemplaza la consulta médica, y en ningún caso deberá tomarse como consejo, tratamiento o indicación médica. Ante cualquier duda deberá consultar siempre con su médico tratante.