Este material es de carácter educativo e informativo únicamente, no sustituye ni reemplaza la consulta médica, y en ningún caso deberá tomarse como consejo, tratamiento o indicación médica. Ante cualquier duda deberá consultar siempre con su médico tratante.
¿Sabías que varias enfermedades prevenibles por vacunación, tales como la viruela, la poliomielitis, la rubéola, el síndrome de rubéola congénita, el sarampión y el tétanos neonatal han sido eliminadas y/o controladas en la Región de las Américas gracias al Programa Ampliado de Inmunización (PAI)? (1)
Las vacunas y el agua potable son las dos herramientas más importantes para prevenir enfermedades, de acuerdo a la Organización Mundial de la Salud (OMS). Afortunadamente, en la Argentina, ya no se registran casos autóctonos de Sarampión desde el año 2000 y de Rubéola congénita desde 2009. El último caso de poliomielitis fue en 1984, el de difteria en 2006, del tétanos neonatal en 2007 y se redujo en más del 96% los casos de trasplante hepático por el virus de la hepatitis A. Estas conquistas convierten a la vacunación en una política de estado (2).
Las vacunas que se aplican de manera sistemática en la población representan un pilar fundamental en el cuidado de la salud de la comunidad (1). Por eso, hemos preparado un resumen sobre sus aspectos más importantes.
¿Qué son las vacunas?
Las vacunas son preparaciones que se utilizan para producir inmunidad (defensas) contra enfermedades infecciosas que pueden ser graves para el individuo y, por consiguiente, para el resto de la población. Cuando nos vacunamos generamos anticuerpos, que nos protegen contra microorganismos (gérmenes). Vacunarse hace que no nos enfermemos o que cursemos la enfermedad de manera leve y que, además, no transmitamos la enfermedad (3).
Gran parte de las vacunas se inyectan, pero existen otras que se ingieren (vía oral) (4).
¿Qué tipos de vacunas existen?
Existen tres métodos principales para diseñar una vacuna (5) ¡Conozcámoslos!
1) El que utiliza el agente patógeno íntegro, dentro del cual se encuentran los siguientes subtipos (5):
● Vacunas inactivadas: consiste en el aislamiento del virus o la bacteria patógenos, o uno muy parecido, e inactivarlos o destruirlos por medio de sustancias químicas, calor o radiación. Las mismas se destacan porque no tienen la capacidad para generar la enfermedad (5).
● Vacunas atenuadas: aquí se utilizan los virus patógenos o alguno que sea muy parecido y se mantienen activos pero debilitados. La vacuna triple viral y varicela son algunos ejemplos. No es conveniente aplicar este tipo de vacunas a las personas inmunodeprimidas (5).
● Vacunas basadas en vectores víricos: en este caso se utiliza un virus inocuo para transportar fragmentos específicos, llamados “proteínas”, del agente patógeno de interés con el fin de que éstos induzcan una respuesta inmunitaria sin llegar a provocar la enfermedad (5).
2) Método en el que se utiliza una subunidad antigénica: en este tipo de vacunas solamente se necesita de los fragmentos específicos del virus o la bacteria, llamados “subunidades antigénicas”, que es indispensable que el sistema inmunitario reconozca. Estas vacunas no contienen el agente patógeno íntegro ni utilizan un virus inocuo como vector. La mayoría de las vacunas que figuran en los calendarios de vacunación infantil son de este tipo y protegen a las personas de enfermedades como la tos ferina, el tétanos, la difteria y la meningitis meningocócica (5).
3) El método genético: a través de las vacunas de ARNm, un conjunto específico de instrucciones se insertan en nuestras células con el fin de que éstas fabriquen la proteína específica que deseamos que el sistema inmunitario reconozca y contra la que necesitamos que genere una respuesta (5).
¿Qué es la inmunidad de rebaño?
Cuando una cantidad suficiente de personas de cierta comunidad están vacunadas contra una enfermedad concreta, se puede alcanzar lo que se denomina como la "inmunidad colectiva", también conocida como "inmunidad de rebaño". En este escenario, las enfermedades no pueden propagarse fácilmente de persona a persona porque la mayoría de ellas se encuentran inmunizadas. Esto proporciona protección contra la enfermedad, incluso para aquellos que no pueden vacunarse (6).
Además, la inmunidad colectiva también previene los brotes, ya que impide que la enfermedad pueda transmitirse con facilidad. De este modo, la enfermedad se vuelve cada vez menos común y, en ocasiones, llega a erradicarse completamente de la comunidad (6).
Para conseguir la inmunidad de rebaño, el porcentaje de personas que deben ser inmunes varía respecto al tipo de enfermedad. Por ejemplo, para lograr la inmunidad colectiva contra el sarampión es necesario vacunar aproximadamente al 95 % de una población. El otro 5 % estará protegido porque el sarampión no se propagará entre las personas vacunadas. En el caso de la poliomielitis, el umbral es aproximadamente del 80 % (7).
¿Cuál es la importancia del Carnet de vacunación?
Es importante llevar un registro de las vacunas que recibimos a lo largo de la vida. Cuando se cuenta con un carnet de vacunación, es importante (8):
• Guardarlo en un lugar donde se pueda encontrar con facilidad cuando se necesite,
• Llevarlo a las visitas con el médico,
• Controlar que se coloquen en él el nombre de la vacuna, la fecha y la dosis que se aplica en cada etapa,
• Anotar en qué centro médico se da la vacuna (8).
A su vez, los datos de vacunación de los menores son de suma importancia a la hora de inscribirlos en guarderías, escuelas, clubes y demás actividades propias de la edad (8).
¿Qué tengo que hacer si perdí mi carnet de vacunación?
En caso de extraviar el carnet de vacunas, se puede intentar recuperar la información en sitios oficiales o confiables. También, se pueden revisar registros electrónicos provinciales, registros médicos, o copias en caso de haberlas entregado en instituciones como jardines o escuelas. De igual modo, si no existe registro, se debe comenzar con el esquema nuevamente según la edad de la persona (3).
¿Cuál es la importancia de cumplir con el esquema recomendado?
Las vacunas pueden tardar semanas en formar los anticuerpos protectores. Por eso, no es conveniente esperar hasta el momento en que considere que el niño podría exponerse a una enfermedad grave, como por ejemplo al empezar a ir a la guardería, viajar al extranjero o durante el brote de una enfermedad (9).
Si la vacunación se demora, los niños pequeños pueden estar expuestos a enfermedades que se pueden prevenir con vacunas, provenientes de distintas personas o lugares, como padres, hermanos o hermanas y/o visitas en la casa (9).
Si estamos sanos, ¿por qué es importante vacunarse?
Estar sanos o tener una buena alimentación no es suficiente para prevenir enfermedades. Las vacunas nos protegen contra afecciones que pueden ser graves, dejar secuelas e incluso generar brotes o epidemias. Tal es así, que cuando nos inmunizamos no sólo nos estamos protegiendo a nosotros mismos, sino también a quienes nos rodean lo que hace que la comunidad esté protegida, disminuyan las enfermedades e incluso se puedan erradicar (3).
¿Se pueden aplicar varias vacunas juntas?
Aplicar distintas vacunas al mismo tiempo no aumenta el riesgo de tener efectos adversos. La administración simultánea de vacunas es segura y efectiva. Las vacunas responden igual ya sea que las apliquemos solas o juntas en una misma visita (3).
¿Qué tengo que hacer si me atrasé en la vacunación?
Si ocurrió un retraso en la aplicación de alguna vacuna, se debe concurrir a un centro de vacunación para completar el esquema, ya que la mayoría de las vacunas se pueden administrar a cualquier edad. No es necesario volver a aplicarse todas las vacunas, sino simplemente continuar con las dosis faltantes (3).
¿Qué vacunas corresponde aplicarse en cada etapa de la vida?
Las vacunas nos protegen durante toda la vida (4). Encontrá acá cuáles son las vacunas que corresponden para los bebés, niños y niñas:
En el Calendario Nacional de Vacunación de Argentina hay vacunas (gratuitas y obligatorias) para todos los grupos de edad (3). Conocé cuáles son las vacunas que deben recibir los adultos haciendo click acá:
Sabemos que a veces los nombres y referencias de las vacunas pueden ser algo confusas, el siguiente cuadro puede ayudarte a aclarar estas dudas:
¿Dónde se aplican las vacunas incluidas en el Calendario Nacional de Vacunación de Argentina?
Todas las vacunas del Calendario Nacional de Argentina son obligatorias, gratuitas y se aplican en los vacunatorios, centros de salud y hospitales públicos del país. También se encuentran en los vacunatorios privados y en farmacias. Podés conocer qué centro se encuentra más cercano a tu ubicación aquí.
Nuestro calendario incluye vacunas para todas las etapas de la vida, situaciones especiales o para grupos específicos (10). Descargá el calendario aquí y ¡cuidate a vos, a tu familia y al resto de la comunidad!
