Este material es de carácter educativo e informativo únicamente, no sustituye ni reemplaza la consulta médica, y en ningún caso deberá tomarse como consejo, tratamiento o indicación médica. Ante cualquier duda deberá consultar siempre con su médico tratante.
Las vacunas contra el Covid-19 son seguras y eficaces, y proporcionan una protección eficaz contra las formas graves de la enfermedad y la muerte (1). Además, se convirtieron en una herramienta fundamental para mitigar el impacto de la pandemia, ya que vacunarse puede ayudar a evitar que se propague el virus y es una de las mejores formas de protegerse a uno mismo y a los demás (1,2). Por ende, la vacunación es el camino que debemos recorrer para hacer las cosas que nos gustan con las personas que queremos, protegiéndolos y protegiéndonos (1).
Sin embargo, sabemos que, muchas veces, lo nuevo puede generar temor y dudas. Por eso, es muy importante informarse y evacuar algunas de las inquietudes más frecuentes respecto a la inmunización y las vacunas contra el Covid-19. ¡Empecemos!
- ¿Por qué vacunarse contra el Covid-19?
Vacunarse es una forma segura de desarrollar inmunidad frente al Covid-19 ya que le enseñan a nuestro sistema inmunitario a reconocer el SARS-CoV-2 que causa esta enfermedad y a generar anticuerpos para combatirlo (1,2). Asimismo, las personas que hayan sido infectadas por este virus también deberían vacunarse tras su recuperación, excepto que su médico lo desaconseje por alguna cuestión en particular (2).
- ¿Funcionan las vacunas contra el Covid-19?
Sí, todas las vacunas contra el Covid-19 que han sido aprobadas por las autoridades regulatorias nacionales demostraron ser seguras y eficaces para prevenir la enfermedad (3). Si bien las personas que están completamente vacunadas pueden eventualmente contraer la infección posvacunación y transmitir el virus a otras personas, se ha comprobado que el padecimiento de la enfermedad es más leve y que, frente al contagio, transmiten el virus durante un período más corto que las personas no vacunadas (4).
- ¿Cuál es el mecanismo de acción?
Las vacunas actúan mediante la simulación de los agentes infecciosos – virus, bacterias u otros microorganismos – que pueden causar una enfermedad. Esto “enseña” a nuestro sistema inmunitario a generar una respuesta rápida y eficaz frente al patógeno (1).
Existen diferentes tipos de tecnologías mediante las cuales puede desarrollarse una vacuna. Las más tradicionales funcionan introduciendo de manera atenuada un agente infeccioso para que nuestro sistema inmunitario genere una memoria de él. De este modo, el sistema inmunitario puede detectar y combatir el patógeno rápidamente antes de que éste actúe. Algunas de las vacunas para el Covid-19 se han diseñado con este tipo de plataforma (1).
En pandemia, también se han desarrollado otras vacunas contra el Covid-19 aplicando nuevos métodos; son las que se conocen como vacunas de ARN mensajero o ARNm. Éstas, en lugar de introducir antígenos, insertan el código genético necesario para que nuestro organismo produzca el antígeno por sí mismo. Es decir que las vacunas de ARN mensajero enseñan a las células a fabricar una proteína que desencadena una respuesta inmunitaria en el organismo. Esta respuesta hace que se produzcan los anticuerpos que te mantienen protegido contra el virus. La tecnología de las vacunas de ARNm se ha estudiado durante varias décadas, no contienen ningún virus vivo y no interfieren con el ADN humano (1).
- ¿Por qué algunas personas vacunadas siguen enfermando?
Porque ninguna vacuna previene la enfermedad al 100%. Las vacunas reducen el riesgo de contagio y/o de padecer un cuadro grave. En este contexto, habrá un pequeño porcentaje de personas con su esquema de vacunación completo que, aun así, enfermará (3).
¿Cuáles son los posibles efectos secundarios de las vacunas contra el Covid-19?
Las vacunas están diseñadas para proporcionar inmunidad sin los peligros de contraer la enfermedad. Algunos de los efectos secundarios leves o moderados que podrías sufrir tras la vacunación son: (1)
● Dolor en el brazo en el lugar de la inyección
● Fiebre leve
● Fatiga
● Dolores de cabeza
● Dolores musculares o en las articulaciones
● Escalofríos
● Diarrea
Si los síntomas persisten durante más de unos días, es importante consultar con un médico para que aconseje cómo proceder (1).
- ¿Cómo lograron que las vacunas contra el Covid-19 se hayan elaborado tan rápido?
Los científicos pudieron desarrollar vacunas seguras y eficaces en un periodo relativamente corto de tiempo gracias a una combinación de factores que les permitió ampliar la investigación y la producción sin comprometer la seguridad y eficacia de las mismas (1).
En virtud de la pandemia y el impacto general a nivel mundial, todo el sistema de salud puso manos a la obra y trabajó de manera colaborativa en tiempo record (1, 5). El mundo entero estaba a la espera de una solución que ayude a mitigar el impacto de la pandemia – por lo que hubo decenas de miles de voluntarios que decidieron participar de los ensayos disponibles. Además, los procesos de investigación clínica que corrieron en paralelo, permitiendo que la información se recabara mucho más rápido (5).
- ¿Es realmente necesaria una dosis de refuerzo?
Las dosis de refuerzo desempeñan un papel importante en la protección contra las enfermedades graves, la hospitalización y la muerte debido a la COVID-19. Para saber cuándo hay que ponerse una dosis de refuerzo, debes seguir las recomendaciones de las autoridades sanitarias locales y, en caso de dudas, consultar con el médico (1).
Más allá de la vacunación, es fundamental continuar con todas las medidas de salud pública que ayudan a mitigar la propagación del COVID-19, como la ventilación de los espacios, el uso de mascarillas y el correcto lavado de manos (3).
