1. La vitamina D favorece al sistema inmunológico
Tener niveles de esta vitamina en el cuerpo ayuda a prevenir enfermedades. Además, es sabida la relación entre concentraciones bajas de vitamina D y enfermedades autoinmunitarias, diabetes, obesidad e infecciones.
2. La exposición al sol potencia su absorción
La síntesis de la vitamina D se favorece con la exposición a rayos UV.
Esta es una forma excelente de tener concentraciones adecuadas en sangre y así, ayuda a evitar las enfermedades mencionadas.
3. La alimentación también ayuda
Hay alimentos ricos en vitamina D, como pescados grasos, huevos, hongos o lácteos.
4. Otra alternativa: los complementos
Si no es posible exponerse al sol o tener una dieta rica en vitamina D, la administración complementaria ayuda a prevenir ciertas enfermedades y a mejorar el pronóstico de otras, como diabetes mellitus tipo 1, lupus, artritis reumatoide e hipertensión. En todos los casos, es importante que consultes con tu médico tratante antes de iniciar cualquier tipo de tratamiento complementario.
5. La vitamina D: su actividad sobre la célula tumoral
Cumple un rol importante en la prevención de algunos tumores como el de mama, colon y próstata favoreciendo a que en algunas células tumorales se altere el mecanismo de división celular así como también la fabricación de vasos de los cuales se nutren las células tumorales.